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María Fernanda Méndez, directora institucional de Christel House México, habló en entrevista para TURISTAMPA sobre esta organización internacional que, sin fines de lucro, tiene presencia en México, Estados Unidos, India y Sudáfrica, y próximamente en Jamaica, apoyando a los niños y jóvenes de escasos recursos a romper el círculo de pobreza a través de la educación.

 

Los jóvenes salen de la preparatoria listos para la universidad.

Comentó así nuestra entrevistada, que la fundadora de esta Organización fue la señora Christel DeHaan, filántropa de origen germano-griego, propietaria de los tiempos compartidos RCI, que llegó a Estados Unidos en donde inició con la loable labor de ayudar. Desde la central ubicada en Indianapolis, la Organización se ha expandido a los países arriba mencionados.

 

 

 

A México llegó en 1998, cuando la señora DeHaan visitó una casa hogar en Texcoco liderada por monjas. Se reunió con especialistas en temas de educación para ver qué podría hacer y decidió fundar el primer centro Christel House funcionando como centro de educación complementaria, en el que los niños iban a las escuelas públicas durante la mañana y por la tarde a Christal House o viceversa y servía para ayudarles a hacer sus tareas y apoyarlos en lo referente a computación e inglés. Después de seis años trajeron su modelo escolarizado del centro que tenían en Venezuela y a partir de ahí se establecieron los centros escolarizados en México y los demás países en donde Christel House tiene presencia.

 

María Fernanda Méndez, directora institucional de Christel House.

Christel House es una escuela de modelo de 18 años, desde primaria hasta que terminan la preparatoria y más allá, pues les ayudan a ingresar con becas a las universidades. Les dan seguimiento con el programa vida y carrera. Durante su tiempo en la escuela, a los alumnos se les imparten diferentes materias incluso música, arte, deportes, yoga y ajedrez.

Los alumnos de Christel House tienen la gran oportunidad de estudiar, aprender y ser profesionistas en el futuro.

En su plantel de Tacubaya, en la Ciudad de México y único en el país, albergan a 661 alumnos y ya cuentan con 271 exalumnos y dan apoyo a 470 familias. Para poder ingresar a Christel House, se realiza un estudio socio-económico y sólo entran niños cuyos padres tienen un ingreso de $5,000 mensuales o no tienen un sueldo fijo.

 

Christel House está en constante comunicación con los padres de sus alumnos, pues la responsabilidad de educar debe ser compartida, por tal motivo cuentan con escuela para padres, dan conferencias y hay trabajo comunitario. Los padres firman una carta compromiso para que sus hijos no falten a sus clases. Se les otorga una beca del 100% para estudiar ahí o dependiendo del caso, se les cobra una pequeña cuota.

 

Niños felices y amados rompiendo el circulo de pobreza gracias a Christel House.

Asimismo la Organización cuenta con un programa de salud y nutrición y se les ofrecen desayunos y comidas a los niños durante su estancia en el centro, pero con la pandemia, al no haber clases, Christel House se dio a la tarea de ir casa por casa repartiendo despensas para los alumnos y sus familias.

 

A través de su programa Vida y Carrera, se va encauzando a los pequeños en aquello que les gustaría estudiar al terminar el colegio. Se les aconseja y orienta y cada año se gradúan jóvenes que ingresan a universidades públicas o privadas con 90 ó hasta 100 % de beca.

 

De esta forma, Christel House es un apoyo enorme para las familias de bajos recursos que no se conforman y desean que sus hijos se preparen para enfrentar la vida, rompiendo el circulo de pobreza.