“Nuestra especialidad es dar una experiencia inolvidable a nuestros pasajeros. Es un destino para cualquier mercado, un viaje tranquilo que se puede explorar en familia, pareja, o amigos”

En un desayuno-seminario, Ana Albert Travel, quienes se han posicionado por ser una operadora con 27 años de trayectoria, en colaboración con Etihad Airways, realizaron un seminario para dar a conocer las maravillas de Egipto.

Un país fascinante y rico en historia para conocer una de las civilizaciones más importantes del mundo, y también de las más misteriosas. Faraones, pirámides, dioses, el mítico río Nilo, en los destinos de El Cairo, Luxor, Aswan, que pueden combinarse con otros ya sea en el Medio Oriente, Europa o África, para ampliar la experiencia.

En el evento realizado en Au Pied de Cochon, en la Ciudad de México, Max Kusznir, Director General de Ana Albert Travel, aseguró que es un excelente momento para viajar a Egipto, ya que se encuentra a buenos precios debido al interés del destino para atraer más turistas. Mencionó también que Ana Albert Travel ofrece diversos paquetes con experiencias increíbles a la mano de expertos y guías en español, así como viajes a la medida y grupos.

“Nuestra especialidad es dar una experiencia inolvidable a nuestros pasajeros. Es un destino para cualquier mercado, un viaje tranquilo que se puede explorar en familia, pareja, o amigos”, recomendó Max Kusznir. “Hay que destacar que siempre ha sido un destino buscado, no hay que venderlo como un destino barato, pero sí como una oportunidad tarifaria en estos momentos, sumando que ahora es la mejor temporada para viajar, ya que hasta marzo es cuando el clima es más agradable”, agregó.

Por su parte, Lourdes Castillo Gerente de ventas de Etihad Airways, por parte de Sales Internacional, mencionó que los vuelos parten de Los Ángeles, Washington, Nueva York, Toronto o destinos en Europa, además de contar con 50 códigos compartidos. Adicionalmente, en el aeropuerto tienen transportación gratuita hacia Dubai, que se encuentra a 45 minutos de distancia.

Por Ariadna Ramo