• Contradicciones del gobierno entrante
• Los especialistas en favor de Texcoco
Por Víctor Manuel Bermúdez
El tema sobre el Nuevo Aeropuerto que dará servicio a la capital del país sigue en la controversia a medida que se acerca la fecha del 28 de octubre señalada por el presidente electo para realizar una consulta popular o encuesta que definirá si se continúan las obras en Texcoco o se construyen “dos pistas” en Santa Lucía.
Estamos a unos días de llegar a esa cita y aún el gobierno entrante no ha dado a conocer a detalle ¿cómo será la consulta?, ¿qué preguntas contendrá?, ¿qué personal la realizará?, si el resultado de las mesas que han dicho instalarán en parques contará con las sábanas informativas para que el público este enterado de la participación que hubo a manera de las realizadas por el INE.
Por otra parte en el gobierno entrante parecen estar “hechos bolas” ya que existen una serie de contradicciones cuando declaran en entrevistas ante los medios de comunicación y en presentaciones en la plaza pública.
Otra interrogante es quien o quienes calificarán los resultados de la consulta, ya que si son el próximo titular de la SCT, Javier Jiménez Espriú y el proyectista José María Riboo, pues serían juez y parte y por tanto la credibilidad estaría en entredicho.
Una de las arengas de AMLO durante su campaña es que encabezaría un gobierno austero, pero resulta que Jiménez Espriú informó recientemente que solicitó a la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) que elaborará un estudio sobre la viabilidad para tener dos aeropuertos en la Ciudad de México, el costo sería de 15 millones de pesos aproximadamente.
La propuesta del próximo gobierno ha sido de mantener el actual aeropuerto “Benito Juárez” exclusivo para vuelos nacionales y construir dos pistas y un edificio terminal en la Base Aérea de Santa Lucía.
Cabe señalar que todos los estudios realizados por especialistas y organizaciones internacionales de prestigio en aeropuertos y aeronáutica ya fueron presentados, amén de que se dude de su imparcialidad y ahora pareciera que se pretende hacer un estudio a la medida.
Con esas propuestas se confunde aún más a la opinión pública ya que la disyuntiva entre las dos opciones no es si pueden operar dos aeropuertos es decir el de la Base Militar y el actual AICM, ello si es posible, el problema es que operarían con restricciones es decir se tendrían que espaciar al doble las distancias entre aviones a 8 o 10 millas en la trayectoria final de aproximación, por tanto al final se incrementaría de manera marginal el número de operaciones sin lograr una solución a largo plazo.
El Colegio de Ingenieros Civiles de México entregó a principios de septiembre a quien será el secretario de Comunicaciones un dictamen sobre la viabilidad de continuar con las obras del NAIM, tal y como se habían comprometido con AMLO, indicando que debido a la planeación y los avances de la construcción era la opción más conveniente.
Aún más le hicieron saber a Jiménez Espriú que el costo de Santa Lucia sería de 385,738 millones de pesos en tanto el NAIM tendrá un costo de 232,230 mdp, cosa que descalificó el funcionario entrante.
También el Consejo Coordinador Empresarial se pronunció por la opción NAIM como la mejor solución para resolver el problema de saturación que presenta el actual puerto aéreo capitalino.
El Colegio de Pilotos Aviadores de México, llegó a la conclusión de apoyar la continuación del NAIM en Texcoco. Debido a que cumple con todas las recomendaciones del manual de la OACI, además de que está proyectado para satisfacer los requerimientos dela aviación nacional para las próximas cuatro o cinco décadas.
Otros organismos que se han manifestado por el NAIM son la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), Instituto Mexicano para la Competitividad (IMC), La Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA), el Colegio de Controladores Aéreos entre otros.
No obstante que diversas organizaciones y asociaciones se han manifestado en favor de aterrizar el proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), Javier Jiménez Espriú, impulsor del proyecto Santa Lucia, manifestó recientemente que de continuar con las obras en Texcoco, estas se terminarían en el 2024 y por tanto se tendrá que hacer una “cirugía mayor” al actual aeropuerto “Benito Juárez” para que pueda dar el servicio en ese lapso.