• Nueva versión el piloto estrelló el avión
• Sin rastro a cuatro años de su desaparición
Por Víctor Manuel Bermúdez
Nuevamente volvió a ocupar los espacios informativos el vuelo MH370 de Malaysia Airlines ahora con la versión de que el avión fue estrellado de forma deliberada por el piloto Zaharie Ahmad Shah de 53 años, según un programa televisivo australiano.
Expertos en aviación basados en datos recopilados y analizados en el programa 60 minutos de la TV australiana, concluyeron que tras un minucioso estudio de la trayectoria de la aeronave, ésta fue colisionada deliberadamente por su tripulante quien realizó una serie de maniobras calculadas con precisión para escapar de los radares y asegurase que el avión desapareciera en una localidad remota.
Según esto el piloto se puso la máscara de oxígeno, despresurizó la cabina dejando inconscientes a todos los demás pasajeros y desvió el aparato hasta que cayera por falta de combustible.
La respuesta a esa versión no tardó en aparecer, diversos especialistas internacionales manifestaron su desacuerdo indicando que si la intención del piloto era acabar con su vida y la de las 238 personas más a bordo, lo hubiera podido realizar en cualquier fase del vuelo, siempre y cuando el copiloto Fariq Abdul Hamid de 27 años, hubiera estado de acuerdo.
Si estaba operando en el ambiente de vigilancia de radar secundario, con solo apagar el transponder de la aeronave hubiera sido suficiente para evitar todas las supuestas maniobras que según determinaron realizó con precisión.
Otras opiniones indicaron que para personas que están dentro del sector aeronáutico es muy factible que el vuelo MH370 haya sido desviado y estrellado de manera deliberada, de acuerdo a los informes de que llevaba una carga de iridio y que algunos intereses globalizados no les convenía que llegará su destino.
Bueno, hay quienes mantienen la teoría de que la aeronave fue raptada por alienígenas, es decir debido al cargamento que transportaba se efectuó una abducción, por ello no hay rastros del avión.
El hecho es que a cuatro años de la desaparición del vuelo MH370 con 239 personas a bordo, acontecido el 8 de marzo de 2014 al sur del océano Índico, sin dejar rastro en los radares es inconcebible.
Tras de que el gobierno de Malasia contratara en enero a la empresa estadounidense Ocean Infinity, debido a que Australia, China y Malasia, terminaron la búsqueda sin éxito, se ofreció un pago de hasta 70 millones de dólares, solo si lograban dar con los restos de la aeronave.
Luego de haber inspeccionado 112 mil kilómetros cuadrados en lugar de los 25 mil m2 pactados durante tres meses en el océano Índico, el pasado día último de mayo concluyó sin resultados la búsqueda con el barco multipropósito Seabed Constructor.
Cabe señalar que la compañía norteamericana cuenta en sus buques con equipos con tecnología de punta incluyendo robots submarinos, que pueden rastrear cualquier objeto en aguas profundas.
Con la retirada del Seabed Constructor de la búsqueda del Boeing 777-200 de Malaysia Airlines que realizaba el vuelo MH370 con 239 pasajeros incluyendo tripulación y que desapareció de los radares 40 minutos después de haber despegado de Kuala Lampur con destino a Beijing, China, parece cerrarse el caso más enigmático de la aviación en lo que va del Siglo XXI.
Es casi imposible que con el desarrollo tecnológico actual cuando con un simple teléfono móvil se pueda mandar la ubicación en tiempo real, un avión de las características del desaparecido no haya sido localizado, es realmente un misterio.
Los familiares de las víctimas desaparecidas, 50 de los pasajeros eran malasios incluyendo 12 de tripulación, el resto, 153 chinos, siete indonesios, seis australianos, cinco hindúes, cuatro franceses, tres estadounidenses, dos canadienses, dos iraníes, dos neozelandeses, dos ucranianos, un holandés y un ruso, se oponen a que se termine con la búsqueda, pero la apatía humana parece prevalecer.
