Aviación

• El auge de esa industria en nuestro país requiere
un gran salto
• Los bajos costos han atraído a 302 importantes empresas
Por Víctor Manuel Bermúdez La importante industria aeroespacial que a puesto su mirada en nuestro país debido al atractivo de sus bajos precios de producción y la calidad de sus procesos, así como mano de obra calificada, han ocasionado que México aproveche su cercanía con el mercado comercial más importante del mundo para establecer una especie de maquiladoras de calidad certificada para convertirse en líder en la fabricación de gran parte de los productos que requiere ese grupo.
El sector aeroespacial mexicano esta conformado por empresas dedicadas a la manufactura, mantenimiento, reparación, adecuación, ingeniería diseño y servicios auxiliares tales como laboratorios, centros de capacitación, líneas aéreas, entre otros, para aeronaves comerciales y militares.
El reto ahora será poder pasar de fabricar partes clasificadas dentro del rubro denominado como de parte complementaria, por nombrarlas de alguna manera, para pasar a la producción de piezas fundamentales de alta tecnología para las aeronaves construidas por las dos mayores armadoras a nivel mundial.
Empresas gigantes de la aviación internacional como Boeing y Airbus, se han establecido en territorio mexicano debido a que los bajos costos de producción los cuales están colocados en tercera posición después de China y la India.
México requiere tener una marca propia amén de seguir proveyendo al mercado internacional de los productos manufacturados para la imperante industria de la aeronáutica global.   
Una mención especial requiere la compañía canadiense Bombardier misma que ha sido pionera en establecer centros de diseño, ingeniería, laboratorios y centros de producción para motores, componentes y fuselajes en nuestro país.
Esta ha sido seguida por Eurocopter, fabricante europeo de helicópteros, así como otras importantes marcas de proveeduría internacional como Honywell, General Electric y Grupo Safran.
La certificación de las compañías mexicanas por parte de organismos internacionales con normas como la denominada AS9100 para la medición de la calidad cuya aplicación en la aeronáutica esta a cargo de International Aerospace Quality Group. Es requisito primordial exigido por los fabricantes a sus proveedores.
La encargada en nuestro país de convalidar las certificaciones internacionales es la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) dependiente de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), gran parte de las 302 empresas establecidas en nuestro territorio cuentan con la certificación ISO 9001 y más de la mitad cuentan con la AS9100.
Aeronaves de Boeing, Airbus, Bombardier, Mitsubishi y Embrear, utilizan los asientos producidos por empresas mexicanas al igual que los fabricantes de turbinas como General Electric, Rolls Royce y Pratt & Whitney que incluyen en sus procesos de realización piezas hechas en México. Los trenes de aterrizaje de los aviones de Bombardier contienen componentes maquinados de precisión originados en Querétaro.
Según datos oficiales y resaltados por el presidente Enrique Peña Nieto durantes su gira por Francia, en el 2014 se contabilizaron en el país 302 empresas en el sector aeroespacial cuyo valor de las exportaciones registró ingresos por 6,366 millones de dólares, es decir un incremento del 26% en relación al 2012.
El jefe de la Nación, manifestó que su gobierno busca que otras empresas del país galo sigan invirtiendo en suelo mexicano y aprovechen todas las ventajas que éste ofrece, como el talento y la creatividad de nuestros trabajadores.
El organismo oficial denominado ProMéxico mediante el cual se busca incrementar el impulso del sector para ello se ha implementado el Programa Estratégico de la Industria Aeroespacial 2012-2020, donde se trata de colocar a la nación mexicana dentro de los primeros sitios de proveeduría espacial cuyas exportaciones lleguen a los 12 mil millones de dólares anuales y que los materiales utilizados incluyan un 50 por ciento de contenido nacional.
El reto a futuro de la industria aeroespacial nacional será poder desarrollar una marca propia, debiendo de superar la condición de proveedor para convertirse en líder de esa importante y creciente industria de la construcción de aeronaves.